30 octubre 2007

Recuerdos


Estoy en ese lugar de mi corazón del que puedo recuperar cosas del ayer, que a veces me supera convirtiéndose en anhelo, nostalgia, me engancha con lo perdido y me lleva a darme cuenta del hueco que ha quedado.

Ese lugar que me hace volver al pasado buscando que no se exceda a tal punto que pierda de vista el hoy, que a veces produce un desequilibrio emocional tratando de sustituir los momentos presentes por los ya vividos, por más placenteros, haciendo así la vida más agradable. El problema es cuando queremos regresar y todo está desajustado.

Ese lugar, al que todos llamamos recuerdos, ese que el Nano Serrat describe tan bien con …“uno se cree que los mató el tiempo y la ausencia…”, que nos trae caras, momentos, sentimientos y situaciones vividas, que fuesen buenas o malas, le dieron forma a esto que llamamos vida y a esto que hoy somos.

El recuerdo que nos trae el ayer, cosas que quisiéramos borrar y otras repetir, pero la conciencia nos dice de lo imposible de eso.

Hoy es un día en el que prefiero no recordar lo que fue del pasado, no ver que pasa en mi presente ni saber que será de mi futuro, abandonarme a mi suerte libre de predicciones o adivinos advenedizos, fluir al aire, al sol que me acaricia…hoy hay sol los días grises y nublados se fueron bailando al ritmo de la vida.

Todo este prólogo para decir que te extraño, te extraño maldición y eso a pesar de no tener sentido es la realidad a la que me enfrento día tras día.